Año: 2008.
País: Estados Unidos.
Compañía: Geffen.
Productor: Axl Rose y Caram Costanzo.
Valoración: Imprescindible.
4 sobre 5.
Aquella fue mi mayor decepción, quizás fue la aluminosis la culpable ya que la fecha era el 04 de julio de 1992 y un año más tarde la degradación de la banda era ya demasiado evidente en el escenario, aquel fue el peor concierto que nunca he visto, y espero no ver ninguno peor.
Después de julio de 1993 odie a Axl Rose con todas mis fuerzas, aquella banda prometía ser una de la más grandes de todos los tiempos y el la mató. Mi vida ha tenido dos clásicos uno “Nevermind” de Nirvana en el 91 y otro “Appetite for Destruction” de Guns n´Roses en el 1987; pero si tuviera que salvar uno, no dudaría, el de Axl y compañía.
Ahora 21 años después de aquel Axl se atreve a publicar un nuevo álbum con el viejo nombre de una banda mítica, que aunque le pertenece, aunque siempre fue el “frontman” y el dueño debería respetar como mito. Pero a partir de aquí la sorpresa de este disco repleto de grandes temas, diferentes corrientes, nuevos sonidos y que si lo firmará como Axl Rose ganaría en calidad que no le falta.
Chinese Democracy, Shackler's Revenge, Better contienen la contundencia de antaño. If The World explora nuevos sonidos, y un ramillete de medios tiempos tan agradables en estos grupos de Hard. Muy recomendable.
Esplendido reencuentro con el pasado, que mayor soy.
C.
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